Cómo hacer Buñuelos de Manzana al Horno
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Precalienta el horno a 180 °C y prepara una bandeja de horno cubriéndola con papel vegetal. Esto evitará que los buñuelos se peguen durante el horneado y facilitará su limpieza posterior.
Lava las manzanas cuidadosamente para retirar cualquier suciedad o residuo. Pélalas y córtalas en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor. Es importante que todas las rodajas tengan un grosor uniforme para asegurar una cocción homogénea. Retira el corazón y las semillas de cada rodaja, formando anillos de manzana.
En un bol mediano, mezcla la harina de trigo, el azúcar, la levadura en polvo, la canela y una pizca de sal. Mezcla bien para que los ingredientes secos se integren completamente y el sabor de la canela se distribuya uniformemente.
En otro bol, bate ligeramente el huevo hasta que esté espumoso. Añade la leche y la mantequilla derretida, mezclando hasta obtener una consistencia uniforme. Asegúrate de que la mantequilla no esté muy caliente para que no cocine el huevo al momento de combinar.
Vierte los ingredientes secos en la mezcla húmeda poco a poco, mientras remueves constantemente con una espátula o batidor de mano. Esto ayudará a evitar grumos y a obtener una masa homogénea y suave, ligeramente espesa para cubrir bien las rodajas de manzana.
Sumerge cada rodaja de manzana en la masa, asegurándote de que queden bien cubiertas. Ayúdate de un tenedor o pinzas para que el recubrimiento sea uniforme y retirar el exceso de masa antes de colocarlas en la bandeja de horno.
Coloca las rodajas de manzana cubiertas de masa en la bandeja preparada y lleva al horno precalentado. Hornea durante 15-20 minutos o hasta que los buñuelos estén dorados y ligeramente esponjosos. Puedes girar las rodajas a la mitad del tiempo de cocción para asegurar un dorado uniforme.
Una vez horneados, deja enfriar ligeramente los buñuelos sobre una rejilla y espolvorea con azúcar glas para darles un toque dulce y decorativo. Este paso es opcional, pero añade un acabado visualmente atractivo.
Sirve los buñuelos de manzana al horno ligeramente tibios, espolvoreados con azúcar glas para resaltar su dulzura. Acompáñalos con una bola de helado de vainilla, una salsa de caramelo, o incluso un poco de yogur natural para un toque refrescante y ácido. Estos buñuelos también combinan muy bien con una taza de té de canela o café.
Muchas gracias